El modelo de afiliación abierta de las cooperativas permite el acceso a la creación de riqueza y la eliminación de la pobreza. Esto resulta del principio cooperativo de la participación económica de los miembros: "Los miembros contribuyen equitativamente y controlan democráticamente el capital de su cooperativa". Debido a que las cooperativas están centradas en las personas, no en el capital, no perpetúan ni aceleran la concentración de capital y distribuyen la riqueza de una manera más justa.
Más del 12 % de la población mundial es cooperativista de alguna de las 3 millones de cooperativas del planeta.
Las cooperativas también fomentan la igualdad externa, basadas en la comunidad, comprometidas con el desarrollo sostenible, ambiental, social y económico. Este compromiso se puede ver en su apoyo a las actividades de interés público, el suministro local para beneficiar a la economía local y en la toma de decisiones que considera el impacto positivo para sus habitantes.
A pesar de su enfoque en la comunidad local, las cooperativas también aspiran a llevar los beneficios de su modelo económico y social a todas las personas en el mundo. La globalización debe regirse por un conjunto de valores como los del movimiento cooperativo; de lo contrario, la desigualdad continuará creciendo.
El movimiento cooperativista cuentan con la autoayuda de sus asociados y asociadas y su propia responsabilidad para alcanzar objetivos no solo económicos sino también sociales, como la obtención de empleo productivo y el fomento de la integración social.
¿Querés conocer los beneficios de formar parte de Coopesparta? Ingresá aquí
Fuente: https://www.un.org/